La victoria fue un renacer para Peñarol. Porque no solo había perdido contra Quilmes, el final del partido le deparará seguramente quita de puntos, y aunque no se sabe cuantos, el impacto es cuanto menos dolororso. Era una gran incógnita como reaccionaría el equipo y para suerte de Peñarol fue una contestación rápida y efectiva.
Un partido muy luchado, de defensas ilegales permanentes, de carácter de play off, de poco vuelo ofensivo. En líneas generales no fue agradable para ver, más viniendo del partidazo del viernes, pero esta victoria para Peñarol es oro.
El primer cuarto fue parejo, en el desarrollo y en el tanteador. Boca salió con un Bortz intratable que consiguió 8 puntos consecutivos ridiculizando la marca de Román. Hasta que González se vio obligado a marcarlo ¾ por delante y así impedir que le llegue la bola.
Peñarol constató con una moneda parecida, la bola interna para Román pero las definiciones certeras fueron de Byron Johnson (8 pts), Mata (4 pts) se mostró muy veloz sobre la marca de Masieri y sacó diferencias. Tato Rodríguez (5) y Legaría (5) se golearon entre si.
El cambio de equipo en Peñarol le dio todavía más defensa. Discutible todo, pero los árbitros dejaron seguir siempre, Picarelli, Muruaga y Vega tomaron la media cancha y Ale Diez con Reinick el juego interior por largos minutos. De apoco Peñarol se escapó porque su defensa negó el juego de pases de Boca y lo obligó a resolver por individualidad.
El Huevo Sánchez probó con todo lo que tenía, lo mandó a Edwards a la cancha, uso doble base, lo puso a Masieri de 4. Todo un repertorio de alternativas para ver si algo podía cambiar.
Peñarol marcó un parcial 8-0 para escaparse 25-17 en seis minutos y medio. El la primera conversión de Boca en el cuarto llegó por vía de un triple de Masieri a falta de 3.25 para el primer tiempo. Y aunque suene extraño el partido lo ganaba el local apenas por 5 (25-20), lo que se dice un partido muy aburrido.
Retornaron los titulares, pero nada cambió. El milrayitas cerró por 8 de diferencia el primer tiempo (34-26) con resultado bajísimos puntos.
El segundo tiempo fue bastante parecido. Las acciones de gol fluidas llegaron esporádicamente, el tono siguió siendo un estandarte de acción revolucionara: “luche y venceremos”. Los árbitros Chiti y Tarifeño no se dieron por enterados del nivel de agresión de las dos defensas: así salió el partido.
Boca sigue teniendo muchos problemas en el relevo del alero. Su técnico probó con Casini de 3 y puso la doble base en la mitad de la cancha para tener mejor comunicación en los pases.
Los titulares de Peñarol esta vez volvieron y marcaron algunas diferencias. Se despertó Jackson con 11 puntos en el cuarto (no había marcado en todo el primer tiempo) y su equipo sacó una máxima de 17 (48-31) a falta de 3 minutos. Un triple de Aguirre y otro de Casini le dieron “algo” de gol a Boca que cerró el tercer cuarto abajo por 14 (56-42).
En el último parcial Boca tiró lo que tenía para la diferencia se había hecho muy grande. Descontó un poco con las conversiones de Gabriel Fernández (10 pts). Peñarol resistió la embestida con apariciones oportunas de tres puntos de Jackson (2) y Mata.
En verdad el partido fue aburrido y muy luchado pero Peñarol logró, como sea, neutralizar todas las armas del rival, que lució incómodo y desarticulado casi todo el partido. En ataque disfrutó de la versatilidad de Johnson y las ráfagas de Jackson. Sumo dos puntos de oro. Una victoria que sirve para reencontrar el camino.
Síntesis
Peñarol (72): Sebastián Rodríguez 6, David Jackson 18, Marcos Mata 9, Byron Johnson 18 y Román González 7. (FI) Sebastián Vega 0, Lucas Picarelli 2, José Muruaga 4, Alejandro Diez 3, Alejandro Reinick 4, Facundo Campazzo 0 y Facundo Varela 2. DT Sergio Hernández
Boca Juniors (61): Raimundo Legaria 16, Marcos Casini 8, Leandro Masieri 3, Gabriel Fernández 15 y Mark Bortz 10 (FI), Nicolás Aguirre 6, Fernando Calvi 3, Carl Edwards 0, Alejandro Alloati 0 DT: Oscar Sánchez
Parciales: 17-17, 34-26, 56-42
Fuente.Pickandrooll.com.ar
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